Conoce la Historia del Nissan Skyline GT-R


Nacido como un sedán familiar, el modelo de la marca japonesa recorrió un camino de más de 50 años hasta convertirse en uno de los deportivos más aclamados de la actualidad, el GT-R. 

En sus comienzos, el Skyline era un modelo creado por la compañía nipona Prince Motor, que comenzó a producirlo en 1955. En 1966, la empresa fue comprada por Nissan y la historia de este vehículo empezó a engrandecerse. 



El primer vehiculo que logró fama gracias a sus proezas en las pistas fue el Skyline 2000GT, al que Prince dotó del impulsor G7 y del que fabricó 100 unidades para su aprobación en la competencia. Su debut fue en el Gran Premio de Japón, donde quedó segundo detrás de un Porsche 904. 

Pocos años despues, en julio de 1968, surge por primera vez la versión Skyline GT-R. El carro de cuatro puertas que fue presentado en el Motor Show de Tokio equipaba un motor S20 (2.0 litros y 160HP) derivado del GR8 de 24 valvulas que equipaba el modelo de carreras R380. Gracias a una velocidad máxima de 125 mph y una aceleración que le permitía cubrir el cuarto de milla en 16.1 segundos, el Skyline GT-R logró 36 victorias en menos de 2 años. 

En la década del 70 el diseño del GT-R se ve influenciado por los Muscle Cars americanos de gran éxito. Su dominio en las pistas niponas continuó, pero a causa de la crisis del petroleo se comenzaron a realizar vehículos menos poderosos. Esto derivó en que la versión 1973, de la que solo se fabricaron 197 unidades, fuera el último Skyline GT-R durante 16 años. 

El gran regreso fue en 1989, cuando se lanzó el Skyline GT-R R32, un deportivo equipado con el impulsor RB26DETT de 2.6 litros biturbo capaz de erogar 280 HP. Además de presentar una gran performance, el nuevo bólido presentaba sistemas de punta para la época. 

El gran regreso fue en 1989, cuando se lanzó el Skyline GT-R R32, un deportivo equipado con el impulsor RB26DETT de 2.6 litros biturbo capaz de erogar 280 HP. 

En 1996 surge la siguiente generación, que presentaba cambios estructurales que aumentaban su peso y su tamaño. Tanto a fines de los 80 como a mediados de los 90 se desarrollaron versiones V-Spec que presentaban una suspensión optimizada, frenos Brembo de alta performance y aditamentos aerodinámicos entre otras mejoras. 

Entre 1998 y 2002 se fabricó la última generación que llevó en su nomenclatura la palabra Skyline. Sus líneas fueron completamente renovadas y sus prestaciones lograron fama mundial, al ser capaz de competir con autos mucho más caros de igual a igual. Bajo el capó seguía escondiendo el RB26DETT de 280 HP que combinados con su tracción total, su chasis más rígido, sus frenos de alta calidad y su suspensión revisada; ofrecía un manejo y una aceleración de punta. 

Finalmente, la marca japonesa presentó al sucesor del Skyline en el Salón de Tokio del 2005, y luego este prototipo se convirtió en un modelo de producción, el aclamado GT-R.