Desde finales de 2012 el tope de gama del Audi R8 será la versión V10 plus, con cambio Stronic de 7 velocidades y capaz de entregar 550 CV, todo una bestia de los circuitos para disfrutarlo fuera de ellos.
El restyling del R8 se caracteriza por un diseño mucho más afiliado que le da un corte aún mas deportivo, un paragolpes nuevo con inserciones cromadas en la parrilla y los nuevos faros de LED que desde ahora son de serie en todas las versiones del R8. Otra novedad es la ubicación del difusor, más grande y situado más arriba. La salida de escape en todas las versiones termina en dos salidas redondas brillantes, que le dan un aspecto aún más arrebatador.
En cuanto a los colores que ofrecerá Audi en el nuevo R8 tenemos dos colores sólidos (Blanco y Rojo), cuatros metalizados, y cinco de efecto perla. Excepcionalmente en la versión R8 V10 plus se ofrece un acabado exclusivo en color mate, tan de moda últimamente.
La carrocería sigue construyéndose en aluminio para que el peso sea el mínimo posible y de esta manera hacer que vuele sobre el asfalto. Dependiendo de la versión elegida el peso varía, por ejemplo, el R8 V10 plus sólo esta disponible en versión Coupé y para reducir peso se le ha eliminado material insonorizante, incorpora bacquets en fibra de vidrio, frenos cerámicos y distintos elementos de la carrocería en CFRP.
Aerodinámicamente al nuevo R8 se le han aplicado los mismos baremos que a los coches de competición para optimizar este aspecto lo máximo posible, consiguiendo un coeficiente aerodinámico de 0,35 o 0,36 dependiendo de la versión.
Los motores del R8 se siguen montando a mano, tornillo a tornillo. El cigüeñal se fabrica una aleación de aluminio y silicio, además de seguir contando con la lubricación por cárter seco para colocar el motor lo más cercano al suelo posible.