Menuda perogrullada la que he puesto por título, ¿verdad? Bueno, tiene su sentido. Se lleva hablando desde hace tiempo de las dudas de Porsche sobre si colocar una caja PDK de doble embrague en su GT3 de nueva generación o mantener la manual. Ahora, los encargados del desarrollo han confirmado que sea cual sea la opción definitiva, será única. Es decir, no se ofrecerá el coche con las dos cajas para que el cliente seleccione lo más apropiado para su gusto, sino que se reducirá la gama a una sola opción.
¿Y cuál será esta opción? Pues no se sabe. Según ha comentado Porsche a la gente de Inside Line, existen prototipos rodando con ambos tipos de caja. Los de sistema PDK resultan más rápidos contra el crono, pero pesan más y son menos divertidos de conducir.
Habrá que preguntarse entonces cuál es la clave del GT3: ¿Eficiencia y rendimiento o diversión y sensaciones? Yo me quedo con la manual... ¿y tú?
