El Tata Nano no es el éxito que la marca esperaba. Vendido unos 2.500 dólares, es el coche nuevo más barato del mundo. En un principio, Tata planeaba venderlo también en Europa, pero finalmente se echó para atrás. En India, su mercado principal y para el que fue pensado inicialmente, está lejos de ser el éxito que imaginaban. Aún así, Ratan Tata, el CEO del grupo Tata, no desiste y planea una nueva versión del Nano para Estados Unidos.
"Los Estados Unidos son un mercado atractivo", declaró Tata en una entrevista. "Estamos rediseñando el Nano, tanto para Europa como para Estados Unidos". Añadió que el nuevo Nano sería mucho más sofisticado que el actual, contaría con control de tracción y dirección asistida. También tendrá un motor más potente. Su precio de venta estaría por debajo de los 10.000 dólares, es decir un poco por debajo de los precios practicados por Dacia en Europa con el Sandero.
Esta nueva orientación del Nano es el reflejo de lo ocurrido en el mercado indio donde el Nano fracasó a pesar del revuelo mediático creado en medio mundo cuando se lanzó al mercado. Y es que todas las marcas que han intentado en un momento u otro proponer un producto para las economías emergentes han fracasado porque no propusieron un automóvil como tal, sino una especie de sub producto. El actual Nano fue un paso más adelante, pero sigue siendo más bien una "solución de movilidad" que un verdadero automóvil, al menos en términos de percepción por el público.
El éxito de Dacia está en haber sabido proponer un coche barato pero con todos los elementos y aspecto que uno espera ver en un automóvil. No cabe duda que el grupo Tata ha aprendido de ese error y gracias a Jaguar y Land Rover tiene la capacidad de producir un vehículo rival de los Dacia.
