Toyota Motor Corp. solicitó que le devuelvan 7,43 millones de vehículos en Estados Unidos, Japón, Europa y otras partes del mundo para repararles un interruptor defectuoso en una de las ventanas, en el más reciente problema de calidad de gran escala que afronta la empresa automovilística.
La medida, anunciada el miércoles afecta más de una decena de modelos producidos de 2005 a 2010. No se aplicó de manera homogénea lubricante al interruptor de la ventana del lado del conductor con la subsecuente fricción y a veces emisión de humo en el dispositivo, según Toyota.
No se han registrado accidentes viales ni heridos a causa del defecto. Sin embargo más de 200 casos de problemas fueron contados en Estados Unidos y un número menor en otras partes, como 39 en Japón, dijo el portavoz de Toyota, Joichi Tachikawa.
En Estados Unidos el pedido de devolución para hacerles las reparaciones abarca los modelos Yaris, Corolla, Matrix, Camry, RAV4, Highlander, Tundra, Sequoia y Scion xB y xD, un total de unos 2,47 millones de vehículos.
En Japón, la medida abarca unos 460.000 vehículos. Los modelos afectados son Vitz, Belta, Ractis, Ist, Auris y Corolla Lumion. En Europa, la devolución comprende 1,39 millones de vehículos entre Yaris, Corolla, Auris, Camry y Rav-4.
La medida masiva también se extiende a vehículos en Australia, China y otras partes en Asia.
Toyota intenta corregir la reputación de su calidad tras devoluciones masivas que han afectado un total de 14 millones de vehículos en varios años.
Antes de estos trances, Toyota presumía su gran calidad, basada en métodos de producción con poquísimo personal en los que los obreros se concentraban en el control de la calidad.
Los directivos de Toyota han reconocido que el incremento de los pedidos de devolución de vehículos para hacerles reparaciones se debe en parte a los objetivos de crecimiento demasiado ambiciosos de la compañía.