Nissan parece no equivocarse por estos días haciendo autos. La Rogue que apuntó a competir con las CR-V y RAV-4 no determinó un claro ganador pero sí les discutió de tú a tú y el consumidor tiene una alternativa más en este apetecible segmento.
El modelo que probamos en esta oportunidad fue el SV con tracción delantera. Estaba equipado con un motor de 2.4 litros y 4 cilindros con transmisión continua variable (CVT por sus siglas en inglés) y cuenta con 175 caballos de fuerza para sacudir a sus pasajeros.
La Hyundai Santa Fe tiene cerca de la misma cantidad de caballos de fuerza pero 2 cilindros más, equiparando a la Rouge en potencia, pero no en consumo de gasolina. Además de este modelo que probamos la Rogue viene en dos versiones más: S y SL, ambas con la opción de tracción en las cuatro ruedas (AWD). Por supuesto la tracción en las cuatro ruedas tiene un mayor consumo de combustible.
Dejando la mayoría de los accesorios de lujo como opcionales, Nissan pudo incluir bolsas de aire laterales en forma estándar, que para mí son un deber un este tipo de vehículos. El interior es “muy Nissan”, lo cual lo hace muy aburrido, pero es funcional y cumple con su trabajo.
Los controles son de fácil acceso y el espacio de cabina está bien aprovechado y trae varios pequeños compartimentos para guardar cosas. Las personas altas van a sorprenderse de lo espacioso del lugar para las piernas y lo alto del techo para no golpearse la cabeza.
La maniobrabilidad en este pequeño cross-over es regia. Se maneja casi como un auto al igual que su hermana mayor la Nissan Murano. Fue fácil entrar y salir de los espacios para estacionar.
El consumo de combustible no era el que estaba anunciado por la marca, pero tampoco estaba tan lejos. Obtuve un promedio entre 20 y 22 millas por galón en la ciudad y Nissan había estimado 25 en condiciones de uso mixto.
Por un precio base de $ 24.000, lo compraría por encima de la Santa Fe, CR-V o la RAV 4. El principal problema que tiene es al momento de equiparla con navegación, cuero y sonido Premium, pues le suma $5 mil más al precio de etiqueta.
El mercado está un poco saturado, pero aquí, Nissan se quitó a sus competidores de encima.