Conoce le nuevo Alfa Romeo MiTo Quadrifoglio


Alma... ¿Qué es el alma? No, no se me ha ido la cabeza, del todo por lo menos no, pero es que es difícil explicar por qué cada vez que uno se sube a un Alfa Romeo acaba teniendo que hablar de intangibles para definir las sensaciones que le provoca.





Y como mandan las reglas no escritas, empezaremos por hablarte de lo que se ve y se toca, antes de meternos con cómo se mueve. 

Cuando te acercas al MiTo Quadrifoglio, la verdad es que no tienes la impresión de estar ante una máquina extremadamente deportiva. Sabes que tiene 170 CV, pero no parece más que otros MiTo que hayas podido contemplar, y salvo algunos detalles puntuales en paragolpes, logotipos o llantas, resulta complicado diferenciar a simple golpe de vista al Quadrifoglio de sus hermanos menos prestacionales.


¿Es esto un punto negativo? Según se mire. He de reconocer que el MiTo me ha gustado mucho más en vivo que en fotografía... Siempre me ha pasado así, y esta no iba a ser una excepción, obviamente. Las formas orgánicas y voluptuosas de su exterior hacen que en una instantánea tal vez quede algo más alto de lo que luego en vivo uno lo ve, gracias a la percepción tridimensional de todos los detalles (tranquilo, que más pronto que tarde me veo con Autoblog echando fotos en 3D...).

Es de estos coches que la gente normal no acierta a determinar que se tratan de auténticas bombas, y sólo los más entendidos, tras localizar el trébol de cuatro hojas en su aleta, saben apreciar que "algo gordo se esconde debajo del capó".


Si lo comparamos con algunos de sus rivales "tipo" del mercado, la verdad es que este Alfa sale bien parado. No es retro, ni falta que le hace, así que se trata de un producto totalmente distinto a un MINI. Y es que el encanto del coche británico viene en parte por su historia, pero el Alfa tira de "diseño italiano" para desmarcarse en ese sentido. El DS3 juega a un juego más parecido al del MiTo, con una estética atrevida, pero más de ciencia ficción.

Puestos a sacarle críticas... Para mi gusto a este coche le sobran centímetros de altura. Vale, eso viene impuesto en parte por la plataforma del Punto, por las necesidades de espacio, etc. Pero lo cierto es que si el coche se quedara más cerca de los 1,3 metros de altura, la proporción mejoraría, y no haría que todas las llantas parecieran querer quedarle pequeñas.


Abriendo la puerta accedemos a un habitáculo cuyas dos plazas delanteras son cómodas y espaciosas. La unidad de pruebas llevaba el techo solar panorámico, cuya apertura es inferior a lo que uno se imagina viéndolo desde fuera... El salpicadero tiene unas formas "muy Alfa Romeo", con una enorme consola central que sobresale del mismo. 

La calidad de materiales, ajustes y formas deja atrás prácticamente a cualquier rival "convencional". Un Ibiza, un Polo... No tienen nada que hacer ante un MiTo. Si lo comparamos con un MINI, lo que está claro es que el Alfa está más pensado en cuanto a ergonomía, pues el coche de la BMW tiene muchos guiños retro que a la postre complican la vida un poco. Si miramos el DS3 nos quedaremos algo decepcionados respecto al Alfa, tanto por formas como por materiales...


Los asientos son también típicos Alfa Romeo: Buenas formas, buenos materiales, cómodos y con buena sujeción. No son para nada radicales. Eso sí, cuando reposamos nuestros cuartos traseros sobre el del conductor para encontrar la posición deseada a los mandos descubrimos el mismo problema del Fiat Punto en cuanto al volante: es grande, está muy inclinado respecto a la vertical, y aun en su posición más baja, para mi gusto, sigue demasiado alto. ¿Cómo llego a esta conclusión? Pues porque mis muñecas no alcanzan el aro en su parte superior con todo lo demás en su sitio, y la espalda completamente apoyada en el respaldo. 

Vale, soy un poco rarito, y me gusta llevar el volante "como cuando voy en el coche de rallyes", o sea, cerca, pero con las piernas bastante extendidas y el asiento muy bajo. Personalmente prefiero poder controlar el volante en todo su giro para hacer correcciones y contravolantes a diestro y siniestro sin tener que mover la espalda del asiento, y esta es la mejor manera de conseguirlo. Ese es el único pero que le encuentro por tanto a la posición de conducción, que por otra parte tiene los pedales en su justa medida para poder hacer punta tacón.

La palanca de cambios cae a la mano "donde debe", y por lo demás, todos los mandos los encontramos fácilmente.


El tema cambia un poco en las plazas traseras. No son tan grandes como otros utilitarios del segmento. Y no sólo es tema de espacio, sino la sensación de claustrofobia, comparado por ejemplo con un Punto 5 puertas, es claramente superior, pero... ¿A quién le importa esto? El MiTo no ha nacido para llevar a cuatro personas cada día, y cumple sobradamente cuando le toca hacerlo, aunque el acceso sea algo complicado.

Las especificaciones técnicas ya te las sabes: El corazón de esta máquina es un cuatro cilindros MultiAir de 170 caballos para sólo 1,4 litros, que empujando 1.220 kilogramos (7,17 kg/CV), con un consumo medio de sólo 6 litros a los cien kilómetros, y unas emisiones medias de 139 gramos de CO2 por kilómetro.

El chasis se monta sobre la plataforma del Punto, por lo que conserva la suspensión delantera McPherson, y los brazos tirados con barra de torsión en el tren trasero. No hay tren trasero independiente por tanto, y eso puede ser un pero a la hora de leer las características técnicas, aunque como veremos mañana, la dinámica no se ve particularmente afectada.


El coche cuenta con el sistema DNA que permite elegir entre tres (dos, a la postre) modos de funcionamiento para la asistencia a la dirección, el frenado, el programa del pedal del acelerador, y la emulación del diferencial autoblocante. Las pinzas delanteras, por cierto, son unas vistosas monobloque de cuatro pistones con la preciosa inscripción "Alfa Romeo".

El precio del MiTo Quadrifoglio se queda además en unos escuetos 19.700€... Vale menos que un Ibiza Cupra, por ejemplo, lo cual es toda una declaración de intenciones para un coche, supuestamente, más exclusivo, y con un interior de más calidad.

¿Hará honor al logotipo del trébol sobre las curvas de nuestras carreteras favoritas? Mañana te lo contamos.