Un clasico de los autos, Plymouth Prowler

De vez en cuando las marcas que hacen autos en masa presentan un modelo que está hecho exclusivamente para llamar la atención de los compradores, ya sea por su precio, su poca disponibilidad o porque son muy inusuales, y en la década de los 90 Plymouth vendió un auto justo así: el Prowler.

Diseñado para evocar a los autos hot-rod de los 50, el Plymouth Prowler cumplía con los estándares visuales necesarios. Apareció originalmente como concepto en 1993, el Prowler tenía un cofre largo, suspensión delantera visible y era un roadster de dos plazas. Se veía como ningún otro auto nuevo, y justo ese era el punto.



Aunque el estilo era sumamente retro, el auto era bastante moderno. Tenía cuerpo de aluminio para mantener el peso lo más bajo posible, suspensión independiente en las cuatro ruedas, rines de 10 pulgadas en la parte trasera y un motor bastante moderno para su época.

Aunque su propósito era atraer gente a los distribuidores y seguramente logró que se vendieran unos cuantos Neones más por gente que iba a ver el Prowler, el modelo fue un fracaso comercial. Su problema principal era su motor V6 que aunque tenía buena potencia, el estilo de auto requería un motor V8 a los ojos de los clientes.

Después de la desaparición de la marca Plymouth, el Prowler vivió un año más como Chrysler antes de ser descontinuado. Se vendieron menos de 12 mil durante sus 5 años de vida por lo que es raro encontrarse uno en la calle hoy en día. Gracias a esto el hecho de tener uno ahora garantiza llamar la atención de una manera que muy pocos coches en su rango de precio pueden lograr.

El Prowler debutó en 1997 y sólo se hicieron unos cientos ese año, la verdadera producción comenzó en 1999 (no hubo modelo 98) y duró hasta 2001 aunque el Chrysler Prowler se vendió hasta 2002.

Para su primer año utilizó un V6 de 3.5 litros con 214 caballos de fuerza y el único color disponible era morado. Todos los demás tenían 253 caballos de fuerza. La transmisión era automática de 4 velocidades con cambios manuales.

Durante los años se hicieron varias mejoras. Las opciones de colores aumentaron de manera continua y en 2000 se mejoró la suspensión para ofrecer un manejo más amigable. También ese año se hicieron algunos cambios menores en el exterior e interior.

El equipamiento base incluía vidrios y seguros eléctricos, sistema de sonido Infinity de 300 watts, vestiduras de piel, aire acondicionado y espejos eléctricos y cruise control. Equipamiento de seguridad como control de tracción, bolsas de aire o frenos ABS no estaban disponibles.

Tomando en cuenta que el Prowler es más un auto de fin de semana que uno de uso diario, la falta de equipamiento y sistemas de seguridad pueden pasarse por alto y va más de la mano con la naturaleza hot-rod. De hecho, hubo gente que pensó que el Prowler era demasiado civilizado y que le faltaba potencia.

El Prowler no es un auto para todos los días, pero si busca algo que llame la atención como pocas cosas en la calle, el Prowler será su auto favorito para esos fines de semana soleados.