El nuevo Audi TT 2013


 El Audi TT ultra quattro concept será el gran atractivo que exhibirá la empresa alemana de los cuatro aros en el próximo Wörthersee Tour 2013, que se realizará del 8 al 11 de mayo en Reifnitz (Austria).

Como si hubiese pasado por el bisturí del mejor cirujano del mundo, el Audi TT ultra quattro concept pesa unos 300 kilogramos menos que el modelo deportivo de producción en serie comparable.

Se trata de un vehículo que combina un ligerísimo peso total de 1.111 kilogramos con el motor 2.0 TFSI, que con sus 310 caballos de potencia y 400 Nm permite una relación peso/potencia de 3,6 kg/hp, en línea con los grandes súperdeportivos.



Sus prestaciones lo dicen todo: el AudiTT ultra quattro concept acelera de 0 a 100 km/h en sólo 4,2 segundos.

También vale la pena detenerse en los detalles, porque este vehículo laboratorio rinde homenaje a la construcción ligera, en la que Audi es pionera.

Incluso los actuales TT de producción en serie, con una carrocería que sólo pesa 206 kilos, más los 98 kilogramos de los paneles desmontables, son testimonio del extraordinario conocimiento de Audi en construcción ligera.

Los ingenieros de Ingolstadt y Neckarsulm han trabajado conjuntamente afinando la carrocería Audi Space Frame (ASF) de la actual generación del TT, para este prototipo, aligerando hasta en 43 kilos el peso de su estructura. Esto, junto a las optimizadas piezas desmontables de la carrocería y otras medidas, da como resultado un ahorro de unos 100 kilos.

Audi ha empleado una inteligente mezcla de materiales, de acuerdo con el lema ‘la cantidad adecuada de material adecuado en el sitio adecuado’. El Audi TT ultra quattro concept utiliza polímeros reforzados con fibra de carbono (CFRP) en la parte trasera del coche, en el túnel central, en los pilares B y en el techo. Los componentes de magnesio en el piso y en algunos refuerzos reducen aún más el peso.

La combinación de ligereza y deportividad se ve también reflejada en el aspecto exterior del vehículo. Comparado con el modelo de producción en serie, los diseñadores de Audi han pulido sustancialmente los contornos de este prototipo. Con su gran spoiler, el Audi TT ultra quattro concept muestra orgulloso sus genes de competición. La base del alerón trasero está fabricada en aluminio, mientras que el propio alerón, como elemento funcional, está realizado en fibra de carbono.

Este vehículo laboratorio está pintado en el color especial blanco cristal. El CFRP utilizado en el exterior añade un toque llamativo en el capó, el techo, los laterales y el maletero. En el interior el mismo material adorna el acabado de las puertas, la consola central y el refuerzo transversal que reemplaza al asiento trasero. También se han montado los asientos tipo bacquet del Audi R8 GT. Sólo la estructura de estos asientos, realizada en material plástico reforzado con fibra de vidrio (FRP), reduce el peso en 22 kilogramos respecto a unos asientos convencionales.

El conductor no necesita renunciar a ningún lujo en el equipamiento: aire acondicionado, ventanillas eléctricas y freno de mano electromecánico no faltan en el Audi TT ultra quattro concept. Otro aspecto destacado es que los retrovisores exteriores han sido reemplazados por cámaras compactas que transfieren las imágenes directamente a una pantalla digital.

Para invertir la espiral de aumento de peso, el concepto de construcción ligera Audi ultra se aplica a todos los elementos del automóvil.

Además, los responsables de su desarrollo han optimizado aún más cada componente.

Los frenos delanteros disponen de discos cerámicos con unas pinzas fijas de aluminio, y el sistema de escape, realizado en titanio, termina en un único tubo central. En los aros también se ha rebajado el peso 20 kilos, al estar fabricadas en CFRP, con los radios atornillados realizados en un aluminio muy resistente.

Cada gramo cuenta, especialmente en la suspensión. La reducción de las masas no suspendidas mejora el comportamiento y el confort.

En el Audi TT ultra quattro concept los muelles helicoidales no están hechos de acero, sino de plástico reforzado con fibra de vidrio (FRP). El núcleo de los nuevos muelles se compone de largas piezas de fibra de vidrio trenzadas e impregnadas con resina epoxy. Una máquina envuelve las fibras adicionales alrededor de este núcleo, que tiene sólo unos pocos milímetros de diámetro, formando ángulos alternos superiores e inferiores a 45 grados con respecto al eje longitudinal. Cada una de estas capas soporta a la otra y actúa tanto en comprensión como en tensión. El uso del FRP en este punto reduce el peso en un 40 por ciento (seis kilos en total), mientras que mantiene todas las características positivas para su funcionamiento.

Para perfeccionar aún más la manejabilidad del TT ultra quattro concept, el equipo de desarrollo eliminó peso de los extremos del vehículo y lo desplazó a la parte central. Por ejemplo, la batería de arranque, que es de iones de litio, se encuentra en el interior del habitáculo, debajo del asiento del conductor. Es mucho más pequeña que una batería de plomo y pesa menos de cuatro kilos.

Los 300 kilos de peso ahorrados con todas las medidas tomadas de construcción ligera ayudan a minimizar las inercias que el motor TFSI de 2 litros y 310 caballos de potencia provoca en plena aceleración.

El modificado propulsor de cuatro cilindros desarrolla su par máximo de 400 Nm entre las 1.900 y las 5.000 revoluciones, lo que le sitúa a la altura de un potente V8. Las modificaciones efectuadas en el cárter, el cigüeñal, los árboles de equilibrado, el volante motor, el cárter de aceite y en ciertos elementos auxiliares consiguen que el propulsor sea 25 kilos más ligero y ocupe menos espacio.

Por ello, el Audi TT ultra quattro concept ofrece el placer en la conducción que los aficionados al automóvil presentes en el Wörthersee esperan de un auténtico modelo de altas prestaciones.

Al igual que el ‘Ur-quattro’ de 1980 y los más de cinco millones de vehículos de producción en serie que se han fabricado desde entonces con esta tecnología, el Audi TT ultra quattro lleva también el sistema de tracción integral permanente de la marca de los cuatro aros. De esta manera el agarre está siempre garantizado, a pesar de sus impresionantes prestaciones.

Con su transmisión de seis velocidades, el Audi TT ultra quattro concept es 1,3 segundos más rápido que el modelo de serie cuando acelera de 0 a 100 kilómetros por hora. Su velocidad máxima es de 280 km/h.

Este Audi demuestra las posibilidades técnicas de una mezcla inteligente de materiales. En este sentido, el considerable ahorro de peso se puede lograr incluso en un modelo de producción en serie ya existente. El uso de esta tecnología es factible para futuros modelos que se fabriquen en pequeñas series.