Han hecho falta dos prototipos y cerca de tres años para que Mazda diera forma a su futuro crossover compacto, pero créenos, el resultado ha merecido la pena. El Minagi, ese modelo conceptual que representa la última etapa en el periodo de gestación del futurible CX-5, pasa por méritos propios a convertirse en una de nuestras novedades favoritas del Salón de Ginebra por su delicado equilibrio entre fantasía y realidad. Observándolo desde la barrera de cristal, da la impresión de que ya podemos acariciar sus llaves con la punta de nuestros dedos, solo para regresar al mundo real cuando abrimos sus puertas y nos encontramos cara a cara con su improbable habitáculo.
¿Cuánto más nos hará esperar Mazda para poder saborear el modelo de producción? No lo sabemos, pero puedes continuar comiéndote las uñas con nuestra galería en vivo.