El diseño de los modelos Boxster viene a confirmar sobre todo una filosofía: el aspecto exterior de un Porsche refleja sus valores internos. Y en última instancia los modelos Boxster son sobre todo una cosa: extremadamente deportivos.
El concepto de diseño sigue una regla tradicional en Porsche: la unión de función y diseño. La impresión de su dinámica de conducción y sus formas proceden de un idéntico crisol.
En el frontal se hacen evidentes las mayores prestaciones: tomas de aire sobredimensionadas en una nueva disposición geométrica que le confieren un rostro todavía más dinámico e incrementan el rendimiento de refrigeración. Las aletillas de las tomas de aire del Boxster están esmaltadas en el color del vehículo. En el Boxster S se han mantenido en un deportivo color negro. El llamativo labio de spoiler pone la guinda a su enérgico diseño. El coeficiente aerodinámico de ambos modelos: justo 0,29 y 0,30, respectivamente.
Inconfundible. También de noche: el nuevo diseño de los grupos ópticos. Los modelos Boxster equipan de serie faros halógenos de desarrollo avanzado con luces de posición de LED, que se han integrado separadamente en los grupos ópticos delanteros por encima de las tomas de aire exteriores. Los faros Bi-Xenon con luz de curva dinámica, incluida la luz de conducción diurna en tecnología de LED, se encuentran disponibles discrecionalmente. El nuevo diseño de los faros subraya el pronunciado contorno de las aletas.
El mejor ejemplo de que en Porsche todo se puede incrementar: El Boxster S, que interpreta el concepto roadster de forma aún más atlética. Y más intensiva. Y de forma más eficiente:
su motor, completamente nuevo, cuenta ahora de serie con inyección directa de gasolina (Direct Fuel Injection, DFI). Para más par motor. Y para una potencia muy superior con una simultánea reducción del consumo. El resultado: 228 kW (310 CV) a 6.400 rpm y un par motor máximo de 360 Nm entre las 4.400 y las 5.500 rpm. La aceleración de 0 a 100 km/h con cambio manual precisa tan solo 5,3 segundos. Con el cambio Porsche Doppelkupplung (PDK) opcional, así como el Launch Control del Sport Chrono Paket disponible opcionalmente, se alcanzan incluso los 5 segundos redondos. Dependiendo del tipo de caja de cambios, también se ha podido reducir el consumo de combustible hasta en un 15% y las emisiones de CO2 hasta un 16%.
Además de las ruedas Boxster S II de 18 pulgadas con un nuevo y dinámico diseño, el Boxster S cuenta con un sistema de frenos que se distingue por sus llamativas mordazas esmaltadas en rojo. Los discos de freno, que son más gruesos que los del Boxster en el eje trasero, incrementan su resistencia a la fatiga.
Las aletillas de las rejillas de las tomas de aire delanteras están acabadas en color negro. Para una estampa singularmente dinámica y llamativa. Junto con la salida doble de escape central en nuevo diseño, confieren una presencia imponente.
Además del aro del volante, las palancas de cambio/selectora PDK y de freno de mano y los tiradores de puerta, en el Boxster S también están tapizadas en cuero las tapas de los compartimentos de puerta y la tapa del compartimento trasero de la consola central. Las esferas de los instrumentos son de color aluminio.
Esto en cuanto a los datos. Para conocer mejor la sensación de conducción a bordo del Boxster S sólo podemos darle un consejo: súbase y póngalo en marcha.