En ocasiones, algunos coches de competición tienen el mismo atractivo que un MiG-21: no es que sean necesariamente bonitos, pero tienen esa aura de haber sido pensados con un único propósito y cumplir tal y como se espera de ellos. Sin embargo, el Lotus Evora Cup es precioso se mire desde el punto de vista del que se mire. Las finas pero tampoco terriblemente carismáticas líneas del Evora de calle se ven radicalizadas con nuevas piezas de fibra de carbono, la combinación del alerón con sus nuevas entradas de aire dan aspecto de asesino a un coche que de serie más bien parece lo que es: un prestacional deportivo de cuatro plazas para gente que solo lo exprimirá en momentos puntuales. Y por si hiciera falta demostrarlo, Lotus se ha llevado uno de estos coches a la concentración anual de clásicos de Monterey, donde está siendo exhibido para deleite de los asistentes.
Como ya te contamos, este Evora homologado para competir en la GT4 y su propia copa monomarca sube el caballaje de su motor Toyota V6 hasta los 395 CV, que tendrán que tirar de 200 kg menos gracias a la eliminación todas esas cosas que sobran en un coche de carreras. Sus cerca de 140.000 euros no lo hacen más asequible que el Evora "completo", pero es que trabajo de homologación también se paga... Y no veas cómo.
