Hace algunos años nadie hubiera imaginado la posibilidad de que un auto se comunicara con quien lo conduce, o mejor aún con otro ejemplar, pero aunque hasta hoy pueda sonar descabellado, todos los incrédulos debemos dejar atrás nuestros prejuicios y prepararnos para lo que se viene en el mundo revolucionario de la automovilística.
El proyecto de innovación impulsado por Ford y su Centro Europeo de Investigación cambiará en gran parte nuestro estilo de vida, ya que gracias al nacimiento del Proyecto ACTIV -Adaptive and Cooperative Technologies for the Intelligent Traffic, o Tecnologías Cooperativas y Adaptables para el Tráfico Inteligente-, muchos de nuestros problemas se verán resueltos. ¿Cómo? No te pierdas esta sencilla explicación.
Tras cuatro años de investigación, en el mes de junio de este año se usó como vehículo de prueba un moderno Ford Mondeo que sirvió para comprobar la efectividad de más de seis millones de euros en un proyecto que hasta entonces parecía nuevo y arriesgado, y del que finalmente se obtuvieron los siguientes resulltados:
El nuevo sistema de vehículos inteligentes que se conectan de forma directa con su entorno permitirá a sus futuros usuarios conocer los límites de velocidad establecios en cada carretera, hacer de conocimiento del conductor las nuevas restricciones del tráfico, así como brindar avisos de desvíos por obras que alteren el transito regular. Toda una maravilla, ¿verdad?
¿Cómo funciona? Gracias al funcionamiento de unos aparatos digitales ubicados a los costados de las carreteras que trasmiten información en tiempo real.
Pero eso no es todo, pues también se anuncia el lanzamiento de un nuevo sistema de comunicación entre vehículos, auspiciado por la BMW, que se regirá mediante telefonía móvil, en el que se reportará el estado de los frenos, la velocidad y otros factores que previenen accidentes tan irresponsables, como los que los medios nos presentan a diario.