Aunque no es muy normal en España, en otros países europeos algunos departamentos de policía incluyen en sus flotas vehículos de altas prestaciones que les permitan dar caza a los malos en vías rápidas. En Francia, Renault acaba de anunciar que suministrará 70 unidades del Mégane RS a la Gendarmería.
Con la incorporación de estos compactos deportivos, se pretende tener un medio de transporte rápido para intervenciones en las que se necesitan vehículos potentes y ágiles. El Mégane RS disfruta de un motor de dos litros sobrealimentado con 250 CV de potencia, y según la homologación, alcanza los 250 km/h y acelera de 0 a 100 km/h en 6,1 segundos. Lo único que no me queda muy claro es dónde meterán a los cacos una vez hayan sido detenidos, pues el RS sólo se vende con carrocería coupé.