El Renault DeZir es el primer proyecto dirigido por Laurens van den Acker y da el puntapié de salida a una serie de concept-cars que ilustrarán la nueva visión del diseño de Renault.
El concept-car DeZir ratifica que el camino emprendido por la Marca en materia del diseño se inspira en tres palabras clave: «sencillo», «sensual», «acogedor». Con sus líneas sensuales y su color rojo brillante, DeZir expresa la pasión por el automóvil.
Propulsado por un motor eléctrico, este coupé deportivo conjuga el respeto por el medio ambiente y la elegancia del automóvil. Inspirándose en el nuevo lema de la Marca «Drive the change » y bajo el impulso de Laurens van den Acker, el Design bebe de las raíces identitarias de Renault para expresar un diseño más emocional.
La “Z” que contiene su nombre es una referencia directa a la etiqueta Z.E. (por cero emisiones) y sus elementos de estilo reflejan la tecnicidad y la ligereza, atributos naturales del coche eléctrico. Las superficies rizadas (paneles laterales de aluminio, parte superior del techo y «párpados» de la óptica delantera) contrastan con esta piel fluida y lisa y le aportan ritmo al conjunto.
Para subrayar la pertenencia a la Marca, una entrada de aire que se ha dibujado en torno a un rombo más ancho y vertical atraviesa el frente delantero de DeZir. El color oscuro de la rejilla de entrada de aire resalta por contraste el rombo y facilita aún más la lectura del modelo. Los faros están concebidos como prismas retroiluminados, consiguiendo así un aspecto muy gráfico. El diseño de este frontal delantero proporciona pistas acerca de la nueva identidad de los futuros modelos de Renault.
Las luces traseras se transforman en una franja de luz que parece suspendida a todo lo ancho del vehículo. El emblema Renault aprovecha el escenario que le brinda la retroiluminación de la rejilla trasera y parece flotar en medio de esta superficie.
Los asientos forman un auténtico nido. La banqueta se ha realizado con elementos de cuero blanco (acolchado para el pasajero y liso para el conductor) enlazados unos con otros, como para traducir el movimiento de atracción mutua.
El puesto de conducción de tipo cockpit contrasta con la ligereza del tablero con el estilo
«tocador» que transmite la butaca de cuero blanco. La butaca blanca queda suspendida sobre un fondo luminoso rojizo. El cuadro de instrumentos subraya visualmente las sensaciones de pilotaje gracias a la visualización gráfica de la información recogida a través del acelerómetro y de los captadores de velocidad.
La pantalla central es táctil e incorpora una navegación inteligente que une los datos del trayecto a la agenda del conductor para proponerle tareas y recorridos optimizados.
Un programa integrado en el cuadro de instrumentos informa al conductor sobre las prestaciones dinámicas de gestión de la energía a través de una interfaz lúdica con un aspecto gráfico parecido al de un videojuego.
Para lograr un equilibrio ideal de las masas, el motor eléctrico que le da vida al Renault DeZir está situado en posición central trasera. La batería de Ión-Litio, con una capacidad de 24 kWh, está colocada en posición vertical detrás de la banqueta. Ofrece una autonomía de 160 km. La base del motor es la misma que para los vehículos eléctricos de serie, con una evolución que permite suministrar una potencia de 110 kW (150 CV) y un par de 226 Nm.
Para mejorar la autonomía y el rendimiento dinámico, los equipos técnicos del Diseño Renault han trabajado para aligerar el vehículo. Así, la carrocería de DeZir es de Kevlar® y el chasis tubular de acero es del mismo tipo que el del Mégane Trophy.
Renault DeZir cuenta asimismo con elementos de suspensión del Mégane Trophy –dobles
triángulos– para una precisión de conducción de alto nivel. La aerodinámica también se ha cuidado de modo especial, con un bastidor carenado dotado de un difusor en la parte trasera. De este modo se obtiene un índice de penetración en el aire (Cx) de 0,25.
Esto permite ofrecer unas prestaciones muy interesantes como el 0 a 50 km/h que se supera en tan solo 2 segundos.
La recuperación de energía al frenar forma parte igualmente del programa, con un dispositivo que se inspira en la lógica de funcionamiento del KERS (Kinetic Energy Recovery System) que se utiliza en Fórmula 1. Al desacelerar, se recupera la energía cinética y se almacena en la batería. En el Renault DeZir, a través de un mando del volante el conductor puede aportar un complemento puntual de energía similar al KERS que se utiliza en Fórmula 1.
